Nuestra fase inicial de reconnocimiento de las necesidades de las agrupaciones y asociaciones de mujeres artesanas, nos dió como resultado que uno de los problemas iniciales es la desconexión del lenguaje entre las artesanas y los expertos en temáticas vinculadas a la artesanía y los negocios.
Esta desconexión usualmente hace que las artesanas no se sientan incluidas en los procesos de cambio e innovación, relegando su participación a ser entes pasivos y no proactivos del crecimiento y mejora de sus modelos de negocio y propuesta creativa.
Usando metodologías colaborativas y de co-diseño, la plataforma (su lenguaje, formato y estructura visual) se trabaja como un proceso abierto y participativo con las artesanas. Permitiendo encontrar un lenguaje común que fomente la expansión de nuestro vocabulario cuando hablamos de artesanía y su comercialización.